martes, 6 de septiembre de 2022

Con permiso me desahogo.

 Llevo años sin venir... el dolor de cabeza me revuelca el estomago. Tengo nauseas, me duelen las piernas. Detesto esta sensación. La migraña es una mierda. Mi terapeuta no me atiende a esta hora así que me toca sacarme las ideas a la brava para no pasar por lo que me paso ayer: la activación que provocan los pensamientos automáticos, la tendencia a la culpa por mi falta de capacidad para satisfacer a las personas, una extraña sensación de paz a la que renuncie intempestivamente y que ahora se tiñe de la apertura que no he generado en años me tienen revuelto. Acabo de calificar parciales de psicoanálisis curiosamente... estoy en proceso de racionalización así que tengo claro los límites sobre lo que puedo entender ahora sobre mi mismo... pero porque no intentarlo?

Nunca me ha sido facil, esto de relacionarme con otros, para la gente suele entenderse como rechazo... en especial cuando estoy saliendo de mi zona de confort, hago corto circuito con facilidad, necesito aprender del otro para poder acercarme y la gente no suele tener paciencia con eso, lo sé, ha sido la constante en mis relaciones de todo tipo.

Busco que esta distancia se recorte poniendo atención, procuro de verdad escuchar lo que la gente dice y lo entiendo como eso, como lo que dicen, finalmente por algo lo hacen, alguna razón tendrán. El problema es que no siempre esa razón tiene que ver conmigo, nisiquiera con ellos, y ahí es donde me enrredo, la ambiguedad me cuesta cuando cuelgo la bata del psicólogo.

Me estresa perder la lucides con la que veo el mundo porque no ocurre muy a menudo... pocas cosas de hecho tienen la capacidad para hacerlo, y he pasado por tres en menos de dos meses que me están doliendo. No, no tengo problemas con ese tipo de dolor, para mal o para bien, en mi oficio se aprende a lidiar con el, a verlo a la cara, a enfrentarlo y a regresar para intentar solucionarlo, y aún así, siempre es más facil hacerlo en compañia, pero la única persona que ha demostrado tener la capacidad de hacerlo, insiste en que tengo que tengo que buscar a alguien más... No dejo de preguntarme si la soledad a la que quiero, bien por costumbre, bien por comodidad, bien por elección, me ha castigado con la comprensión de lo que implica ser libre, no como el acto egoista e infantil de hacer lo que me venga en gana, sino como esa responsabilidad de asumir las decisiones que me mantienen solo, la vida es ya muy hijueputa para cargarle mi peso a alguien, ya viví el guardarme esto para mí estando con alguien, y aunque tengo claro que caminar con alguien más implica que ambos jalemos juntos ambos pesos, no sé si quiero que alguien a quien ya le ha tocado lo suficientemente duro tenga que lidiar con mis vainas.

La costumbre es la madre de los peores sufrimientos, clínicamente lo entiendo, creo que eso es una fortuna, por eso cuando pienso en la soledad como costumbre la veo con compasión, porque finalmente digo para los demás que es costumbre, aunque sea una decisión que he sostenido hasta el momento y que soy responsable de ella, de mí... esta ambiguedad es mía, sí lo entiendo, pero puede coexisir sin contradicción y eso me tranquiliza. La comodidad nunca ha sido lo mío, crecí sin ellas, entiendo lo que es la vida sin estas, tal vez por eso las cosas materiales me valgan tanta verga, nunca he sentido que quiero cosas, prefiero memorias, aunque la gente esté más dada a a entregar las primeras, tal vez por eso hoy dije que no quería jugar al amigo secreto en la oficina... Tal vez por eso me duele no haber ido al circo. ¿Y las elecciones? bueno, ¿qué tanto se puede decir de algo tan fantasmático (psicoanalíticamente hablando) como eso? Elegir la soledad responde a mi mecanismo de defensa estructural... Ahí es donde se pone interesante, puede una mente ir en contra de él? Se puede renegar de este? Me encanta el hecho de solo pensar que sí... Que conquista tan hijueputa.

Lo que me aqueja me trajo aquí, otra vez, a disfrutar hacer esto solo, mientras fumo, con el ruido del ventilador y la tos que me provocan ambos, unicamente por que no tengo mis pinturas para desahogarme sin que nadie tenga la oportunidad de entender. Si llegó hasta aquí, ¿usted, cómo se desahoga?



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